El 26 de abril, un cable alertó a todos sobre la llegada un cargamento de 150.000 barriles de petróleo a la refinería venezolana Amuay
Cuentas Claras Digital (Venezuela) – 21/05/2020
El ministro de servicios públicos de Trinidad y Tobago Robert Le Hunte, renunció tras fuertes disputas dentro del Gabinete, luego de acusaciones masivas sobre reuniones efectuadas con la sancionada vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, y otros funcionarios (entre ellos, el ahora presidente de PDVSA Asdrúbal Chávez). Con información del Caribbean News Global.
Un día después de la visita de los funcionarios, el 28 de marzo, la petrolera estatal trinitaria Paria Fuel Trading Company, recibió un pedido de 150 mil barriles de gasolina de parte de un comprador inusual: ES Euro Shipping SA, tal como reveló el diario local Daily News.
La empresa, registrada en Suiza y propiedad de José Guillermo Ruperti, hijo del controvertido magnate venezolano Wilmer Ruperti, requería la compra de 100 mil barriles de gasolina de 95 octanos y 50 mil de 92 octanos, cuyo destino final sería la isla de San Eustaquio, en las Antillas menores.
Los problemas empezaron cuando Euro Shipping pidió a Paria autorización para que la empresa venezolana IC Global participara de la operación. Las alarmas se encendieron y la gerencia de Paria se comunicó directamente con José Guillermo Ruperti para advertirle que, según las cláusulas del contrato, de ningún modo ese combustible podía terminar en Venezuela (por las sanciones).
Ruperti respondió que fue una confusión y que solo pidieron una recomendación de la empresa, que el destino final nunca sería Venezuela.
El día después de que el buque Aldan (de bandera liberiana) partiera (21 de abril), Ruperti envió un email a Paria solicitando un cambio de destino en la guía del envío: quería que el cargamento fuese ahora con destino a Aruba, 25 kilómetros al norte de Venezuela; tras tensiones entre la petrolera de Trinidad y Tobago y Ruperti, este volvió a aclarar que estaba al tanto de las sanciones en torno a Venezuela y confirmó que no sería el destino final.
El 26 de abril, un cable alertó a todos sobre la llegada un cargamento de 150.000 barriles de petróleo a la refinería venezolana Amuay. ¿El barco? Aldan ¿El vendedor? Maroil Trading, una empresa registrada en Panamá propiedad de Wilmer Ruperti y donde su hijo, José Guillermo, propietario de Euro Shipping, aparece como secretario.