
Hay proyectos que se presupuestan todos los años y no se han concluido
Mariela León / El Universal (Venezuela) – 11/01/2010
El Sistema Eléctrico Nacional (SEN), ahora en el tránsito de la mayor crisis de su historia, ha contado con recursos económicos de al menos $35 mil millones en once años de gobierno. Resultados preliminares de una investigación en progreso, que implicó la revisión de veintidós gacetas oficiales contentivas de los presupuestos ordinarios y adicionales de la nación durante 1999-2009 y convertir los montos en bolívares y bolívares fuertes a dólares corrientes, llevó a Víctor Poleo -especialista en el área eléctrica- a concluir que entre «asignaciones ordinarias de crédito público, créditos adicionales y factura eléctrica, el sector obtuvo en ese período ingresos consolidados por $34.736 millones».
Advierte que de este total la sola factura eléctrica de las empresas se ubica en el orden de $27.016 millones. En vista de estos volúmenes de recursos, el profesor del posgrado de Economía Petrolera de la UCV y ex director de Energía del Ministerio de Energía y Minas (MEM), rechaza la versión de voceros oficiales que atribuyen a «retrasos» de algunas inversiones «la expansión de la capacidad de generación hidrotermo». Más aún, apunta, en un informe de Edelca (marzo, 2009) la empresa estatal acusa un monto de cuentas por cobrar a Cadafe y sus clientes industriales en el orden de $4 mil millones.
«Para explicar la crisis eléctrica en marcha, no hay truco que funcione ante un Caroní exhausto -fuente de energía limpia que provee en 70% de electricidad al país- y unas centrales termoeléctricas nunca construidas», dice Poleo. Señala el analista que al sector eléctrico se le han otorgado $7.019 millones mediante asignaciones ordinarias de crédito público; $726 millones a través de créditos adicionales, y por factura eléctrica, $27 mil millones para gastos de funcionamiento de las empresas eléctricas, en adición a la operación, mantenimiento y expansión de sus redes eléctricas, adecuación y construcción de plantas hidroeléctricas y termoeléctricas.
Especifica que sólo para dos proyectos de generación de Cadafe (filial de la Corporación Eléctrica Nacional, Corpoelec), como son el complejo Uribante-Caparo (La Vueltosa), en Táchira y la conversión a gas de la unidad número 1 de Planta Centro, en Morón, se han dispuesto $681 millones y «aún no se han concluido»; incluso en referencia a la última máquina, voceros oficiales han anunciado repetidamente y de manera infructuosa su puesta en operaciones desde 2007. «Estos y otros proyectos son presupuestados todos los años y no se han concluido en el tiempo previsto», indica.
Pasado y futuro
En un estudio denominado Vulnerabilidad del Sistema Eléctrico Nacional (Anexo abajo), elaborado por Víctor Poleo y un equipo de colaboradores, entablaron un paralelismo entre la inversión esperada y la inversión ejecutada durante el período 2001-2005. Se determinó que Cadafe «tenía previsto realizar inversiones por $643 millones» en el área de transmisión en ese plazo y «sólo ejecutó 24%, es decir $155 millones», adiciona el académico.
Durante 2001-2005 ocurrieron 316 interrupciones mayores de 100 MW en el Sistema Interconectado Nacional. De estas 316 interrupciones 208 eventos (66%) ocurrieron en la red de transmisión. Cadafe contribuyó con 251 (80%) de los 316 eventos que desencadenaron racionamientos mayores de 100 MW.
El bajo nivel de ejecución de proyectos en transmisión por Cadafe durante 2001-2005 materializaron considerables daños económicos a cerca de 1,5 millones de usuarios del servicio en las varias regiones del país.